La peor posada:
Cuando me dedicaba a la música, tuvimos un manager super raro. En una ocasión, nos invitó a una posada.
La pensamos un poco, porque déjenme contarles, como preámbulo, que varias veces antes, nos invitaba a "fiestas" que en realidad era sentarnos en un patio (sin sillas) con 6 cuates suyos como 10 años más grandes que nosotros, y escuchando música rara de fondo (Por rara, me refiero a que primero pusieron el soundtrack de 31 minutos, y terminando siguió un disco tipo "rocker wannabe" con letras como "Jesúuuuuus era un tío increíbleeee!!!" uno tras otro, en repeat, para siempre u_u). Debe haber visto nuestras caras de "Ay... como digo que no?" porque nos dijo "Esta no va a ser en la casa de (el wey el patio de las otras "fiestas), y va a haber comida, y ponche, y piñata y todo!"
Aceptamos, fuímos, y efectivamente. No fué en casa del mismo wey. Fué en la casa de junto. Los invitados eran los mismos weyes de siempre, y otros par de incautos de nuestra edad, que tampoco sabían que hacían ahí.
De comer había sopes. Creo que eran ocho. Los invitados éramos como 12. El ponche estaba X, pero había que decir que estaba buenísimo, porque nuestro manager lo había hecho, y se pasó toda la noche paseando teniendo éste diálogo:
- Hola! qué tal está el ponche?
- Bien
- Yo lo hice
- Ah, te quedó rico
- Si, es que ..(aca entraba una historia aburridísima como de 20 minutos de porqué había hecho el ponche que se resume a "Mi mamá no quería hacer ponche, y pues yo lo hice")
Tuvo ese diálogo con todos los invitados. Por separado. Aunque ya hubiera tenido el mismo diálogo con el wey que estaba parado junto. TODA LA NOCHE
Estábamos a nada de huir con los otros chavos que no sabían como habían llegado, cuando dijeron "Ya vamos a sacar la piñataaaaaaaaa!!!"
Pero no la rompimos.
"Es que si la rompemos, se va a hacer mucho desorden en la calle, mejor que cada quien pase, y agarre sus dulces.
Y pues ya. Agarramos nuestros dulces :-(
Cenas de Navidad Fracasadas:
Esto no es gracioso, pero casi estoy segura que has estado en alguno de los dos lados. Espero que al leerlo, evites que vuelva a ocurrir.
Me gusta cocinar, así que ésto pasó más de una vez, y es horroroso. Cuando te toca cocinar para una fiesta como las de navidad, donde se juntan tus seres queridos, y conviven y se aman y todo, puede ser maravilloso, o puede ser horroroso.
Si hay un espacio en tu cocina para que tus seres queridos convivan ahí, mientras los menos hábiles ayudan con tareas menores, es padrísimo, pero si no tienes el espacio, pues mientras tu cocinas, acomodas, sirves, revisas horno, envuelves cosas en aluminio, decoras pastelitos y demás, todos se sientan a tomar ponche y ser super felices en una fiesta a la que estás invitado, pero no puedes ir. -.-
Si el problema es que tu cocina es pequeña, pues es horroroso, porque aunque te quieran ayudar, tener mas gente dentro de la cocina, es estorboso, y mueres de calor. si el problema es que aunque cabrían todos perfecto ahí, todos decidieron NO acompañarte, pues sufres, porque que manchados. :-(
Celebraciones Deshonrosas!
En navidad, muchos celebramos el estar en familia, querernos, y ser felices, y demás, pero no olvidemos, que para mucha gente, es una fiesta religiosa que amerita cierto respeto. Éstos son algunos fails en los que alguien muy emocionado con la navidad, pero poco entusiasta de Jesús, hace pequeños fails que sazonan los recuerdos:
Mi mamá tenía un nacimiento super elegante y bonito. Todo completamente blanco, y super bien formadito, estilo esculturas griegas. Como éramos niñas, y pues lo blanco es aburridillo, mi mamá, amablemente, nos dejaba "pintarlo". Casi siempre, con acuarelas, para poder despintarlo, pero en algún momento, no sé por que, evolucionamos de la acuarela al acrílico. Coincidió con el año que peor pintamos. San José, por ejemplo, quedó con una túnica muy navideña, rojo con verde, algunos otros tenían coloridas túnicas naranjas, pero lo más memorable, fué que yo pinté a Baltazar. Con la escasa luz de los foquitos, por supuesto que apenas se le veía lo blanco de los ojos, pero como mientras pintaba, noté un detalle en su cara, que yo tomé como una sonrisa, pues le pinté el labio de blanco, así que a la fecha, es el baltazar más sonriente que va a ver al niño.
Los nacimientos son fuente inagotable de faltas de respeto sin mala intención. Espero que todos hayamos visto alguna vez uno de esos nacimientos grandísimos que además del pesebre, traen toda una serie de figurillas ingeniosas, como pastorcitos borrachos, diablitos, angelitos, etc. Pues resulta que una vez, iba con un amigo, mirando un super nacimiento que ponía una vecina, y que amablemente, dejaba entrar a su casa a ver, y hasta te ofrecía ponche. Su nacimiento tenía varios pisos, y en lo que fué por ponche, mi amigo se acercó a ver una escena del génesis, en la que había una serpiente en una rama. La serpiente cayó de la rama al pesebre, y por mas que buscamos, no la encontrábamos. Volvió la vecina con el ponche, le dije que se me había caído la serpiente, y no la encontraba, y me dijo que no importaba, que ya aparecería. El 24, cuando la vecina iba a poner al niño, enconró a la serpiente muy acomodada en el lugar del niño con María y José mirándola con gran amor.
Otra cosa que me encanta son esas figurillas de barro que se usan como nacimiento, pintadas a mano, con muy poco cuidado, porque reuerdo que tuvimos una virgencita que tenía unas cejononononas, que todos los villancicos sobre su dulzura y amor, te hacían pensar "Really? you?" cuando la veías.
Tampoco falta cuando una figura cae en una posición inapropiada con respecto a otra figura y demás.
Espero que tengan una felíz navidad llena de anécdotas fail-divertidas que platicarme!!!
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